El pasado jueves día 24 de junio tuve la oportunidad de asistir a la presentación de lo que las nuevas tecnologías podrán depararnos en los próximo años, dentro de un grupo multidisciplinar creado para generar ideas acerca del posible uso de estas tecnologías en el ámbito de la salud.
La reunión empezó con un vídeo que enseñaba lo que la tecnología está ya en disposición de hacer en el momento actual y al que puedes acceder clicando en el propio video para ver cómo, efectivamente, el futuro ya está aquí. En el vídeo se observa la desaparición total de todo tipo de mandos, teclados o similares en la comunicación con el ordenador; aspecto que, sin duda, era uno de los principales problemas para implantar estas tecnologías, especialmente entre la población más "añosa". Pues bien, parece que ya estamos en disposición de interaccionar con el ordenador sólo mediante nuestros gestos o voz y que la detección de movimientos y su interpretación por las máquinas ya no es nada lejano a nosotros.
Desde esta base técnica, la reunión pretendía encontrar áreas de aplicación de medidas telemáticas en el terreno de la salud y, ciertamente, salieron un buen número de ideas básicas que habrá que madurar en el futuro: recordatorio de fármacos, calendario de citas, control de movilidad/encamamiento, medición de capacidad de flexión en prótesis de rodillas, entrenamiento cognitivo, logopedia, terapia ocupacional, etc.; todo ello, sin mandos y ante una pantalla de televisión (medio al que todas las familias de este país estamos tan acostumbrados, a juzgar por el número de horas que, al parecer, pasamos delante de ella: una media de 261 minutos/día en enero de 2010)
Así que se nos plantea un interesante reto, para el que se agradecen todo tipo de ideas y comentarios en cuanto a su utilidad, en nuestro caso, para mejorar la asistencia a las personas con enfermedad mental.
¡A pensar!
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